DESARROLLO DE PUENTES EN LA CIUDAD DE FLORENCIA.

Durante el periodo del Renacimiento se desarrolla la arquitectura clásica en la Ciudad del centro de Italia y de Toscana, Florencia se encuentra a los pies de los Apeninos y entre las colinas del valle del río Arno. La ciudad se ha establecido en una de las vías romanas que atraviesa Etruria.

Ésta ciudad ha conservado elementos del urbanismo de la colonia romana, en ella se desarrolla la red de calles y  los recorridos peatonales de la Edad Media, se añaden en la distribución urbana de la ciudad inmuebles públicos de gran tamaño, como la catedral Santa María dei Fiori (1296), provistos de varias puertas que se abren en el eje de las calles. En el siglo XIV se organizan los alineamientos en perspectiva propios del Renacimiento.

Es un ejemplo excepcional de ciudad Renacentista, ha conservado su tejido urbano virtualmente intacto. La evolución del urbanismo, manifiesto por una profunda influencia sobre el futuro de la ciudad en el transcurso de los siglos.

Florencia es la obra de Brunelleschi (1377-1446) y de sus continuadores Alberti, Filarete, Scamozzi, entre otros. Reúne todo cerca del Ponte Vecchio, el cual es el más resaltante de la ciudad por sus obras de arte universales del Renacimiento; estos monumentos son puntos de referencia de un paisaje a la vez urbano y artístico, se desarrolla en un recorrido visual que los une entre sí y, al mismo tiempo se une con el entorno: plaza, ciudad o tierra toscana.

Cuando Florencia fue la capital del reino de Italia, de 1865 a 1870. El rey Vittorio Emanuele II, quiso convertirla en una metrópoli a la altura de París, Viena o su Turín natal, con bulevares, y la por esto la transformación de la ribera del río en un lugar de paseo. La importancia de Florencia radica en sus puentes, que en su época fueron característicos del desarrollo urbano y la historia que transcurre de ellos, como lo es el Ponte Vecchio para así poder unir las cuatro grandes calles que conducen a las puertas y dividen la ciudad en cuatro barrios.

Desde el Ponte Vecchio se puede apreciar la imagen de la hermosa ciudad de Florencia, de todos los puentes de la ciudad es el que tiene más relevancia por la belleza de sus obras, un recorrido a través de la historia de la pintura. El puente da un paseo artístico, lo completa el Corredor Vasariano (1564), el pasillo superior del Ponte Vecchio, en la época medieval permitía a los Médicis cruzar del Palazzo Vecchio al Pitti sin mezclarse con el pueblo. Otras plazas que se conecta mediante el puente es la rivalizan con las citadas, La calle Borgo de’Greci comunica la plaza de la Signoria con la de Santa Croce. Bajo la mirada de la estatua de Dante se alza la iglesia del mismo nombre, erigida a principios del siglo XIV.

El Ponte Vecchio significa puente viejo en Italiano, el puente refleja a los proyectos de planteamiento urbano desarrollados durante el Renacimiento. El puente queda ubicado en la Ciudad de Florencia en el centro de Italia y de Toscana, entre las colinas del valle del río Arno. Surge del Renacimiento en la República de Florencia y de los grupos sociales dominantes que pasan a residir en el interior de la ciudad, formando así la nobleza urbana. El puente representa a la ciudad de Florencia, tiene una longitud de 67m, lo sostiene tres arcos, el arco principal posee la irradiación de luz de 30m y el alzado del arco es de 3.5m, los otros dos son iguales su luz es de 27m y el arco de 4.4m, en ancho para transcurrir el puente Vecchio es de 32m, está construido de piedras.

     El puente conecta a la iglesia gótica, era la iglesia de los Médicis, los cuales necesitaban el puente para así poder cruzar el Palazzo Vecchio al Pitti sin mezclarse con el pueblo, encargaron el proyecto a Brunelleschi (1377-1446), el cual una vez más aplicó las matemáticas para definir un orden esencial y puro.

El puente cruza el río Arno, el cual es de gran relevancia urbana ya que permite la fluencia vial. La peatonal Vía dei Calzaiuoli conduce hasta la plaza de la Signoria la cual conecta con el Ponte Vecchio. Allí reina el Palacio Vecchio, sobre el que se eleva una esbelta torre que domina todo el centro. Igual que la del Duomo, también esta plaza fue ampliada y el espacio se remató con la Loggia dei Lanzi o de los Lanceros, en la que se yergue, elegante y provocadora, la escultura de bronce de Perseo sujetando la cabeza cortada de Medusa. Esta figura es la imagen sintética de la cuestión esencial de Florencia: cómo enfrentarse a su belleza sin fracasar en el intento; cómo mirarla directamente a los ojos sin quedarse petrificado. La Galería de los Uffizi fue ideada por Francisco I de Médicis como un recorrido de la mirada a través de la historia de la pintura.

Otro puente que se destaca por su historia es el Santa Trinitá el cual queda al otro lado del río Arno por él se puede transitar, recuerda la labor de destrucción y reconstrucción por la que transcurrió la ciudad. Los nazis, antes de abandonar la ciudad de Florencia en 1944 minaron todos los puentes excepto el Ponte Vecchio y, años después, en 1966, unas devastadoras inundaciones derrumbaron muchos edificios asomados al río, por ello existe la Capilla Brancacci, situada en el barrio de San Frediano. Más allá se erige el Palacio Pitti, sede de ocho museos y antigua residencia de tres poderosas dinastías: los Médicis, los Lorena y los Saboya.

En la ciudad de Florencia se puede denominar el desarrollo artístico como urbano, su arte y detalles en la historia poseen gran belleza en su construcción, las estructuras como los puentes que posee la ciudad tienen un gran predominio urbano, en ellos se desarrolla el arte, historia y las bases de la ciudad, en cada una de las épocas por las cuales atravesaron su uso fue necesario, son parte de los ejes que integran la organización urbana y la conexión en cada una de las vías.

Kelly Guevara.

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